Actualiza los conocimientos en patología infecciosa para un correcto abordaje diagnóstico y terapéutico de la sepsis.
Alrededor del 15% de las asistencias que se efectúan de manera urgente están relacionadas con procesos infecciosos. Ante un paciente con sospecha de infección, se debe procurar establecer un diagnóstico etiológico certero e iniciar el tratamiento antibiótico, principalmente de manera empírica. Por ello, y debido a los cambios sustanciales que se producen en el abordaje diagnóstico y terapéutico de la sepsis, resulta imprescindible la actualización en patología infecciosa.
La sepsis tiene una mortalidad 5 veces mayor que la relacionada con el síndrome coronario agudo o el accidente cerebrovascular. La instauración de un tratamiento antibiótico inapropiado aumenta de manera sustancial la mortalidad en pacientes graves, circunstancia que está presente hasta en el 20% de pacientes con infecciones comunitarias, el 25% en pacientes con infecciones graves. Entre los pacientes con infecciones comunitarias, la presencia de infecciones por Staphylococcus aureus resistente a meticilina y de bacterias Gramnegativas resistentes a las cefalosporinas son las causas más frecuentes de tratamiento inapropiado. Los tratamientos antibióticos inapropiados pueden ocasionar el aumento de las resistencias bacterianas, así como un aumento de los costes sanitarios, al aumentar la estancia media del paciente, y conlleva la realización de pruebas complementarias adicionales.
Por todo ello, resulta fundamental mejorar el conocimiento de los especialistas que, en su práctica clínica habitual, toman la primera decisión sobre el tratamiento a prescribir, lo que mejorará la evolución de los pacientes y disminuirá el gasto sanitario.